miércoles, 5 de enero de 2011

TEATRO REAL




Año 1.818.

En el siglo XVIII los madrileños acudían con frecuencia a disfrutar con la ópera italiana que pusieron de moda en el teatro de los Caños del Peral, situado en el mismo lugar que hoy ocupa el Teatro Real y que fue derribado en el año 1.818 para construir un suntuoso recinto destinado al “bel canto” y situado cerca del Palacio, en la Plaza de Oriente.

En un principio se proyectó como teatro de la Opera, respondiendo a la afición de la Villa y Corte y a los deseos personales de la reina María Cristina.

El proyecto fue realizado por Antonio López Aguado y la obra la concluyó Custodio Romero, que duró más de treinta años.
Su escenario es uno de los más grandes del mundo.
Las pinturas y esculturas que decoran el edificio fueron realizadas por diversos

artistas.

Se inauguró para conmemorar el cumpleaños de la reina Isabel II, el día 19 de diciembre de 1.850. Con la representación de la obra La Favorita, de Donizetti.

A partir de esta fecha, Madrid se convirtió en unos de los lugares indiscutibles de la ópera en el mundo, y lo fue durante más de los setenta y cinco años siguientes.

En la actualidad es la sede de la Orquesta y Coros Nacionales de España, del Ballet Nacional y de la Joven Orquesta Nacional.

El primitivo teatro de Los Caños del Peral tomó el nombre de unos lavaderos públicos existentes en la zona. En un principio fue una “barraca” en la que se había instalado en 1.708 una compañía lírico-dramática italiana.
En él se representaron durante muchos años óperas italianas, hasta que en 1.799, Carlos IV dispuso que en ningún teatro de España se representasen obras no escritas en castellano.

No hay comentarios: